Patrimonio Histórico

Desde 1721 se tienen antecedentes históricos de San Antonio, como un antiguo pueblo minero. Sin embargo, su fundación se establece el 13 de junio del año 1756, después de la llegada de los españoles y los misioneros a la península de Baja California.

El antiguo Real de San Antonio constituyó uno de los primeros pueblos que crecieron al margen del régimen misional. Antes de la llegada de los españoles esta región estuvo habitada por indígenas Huchities, de la “Nación” Guaycura, según constancia que dejó escrita en 1740 Esteban Rodríguez Lorenzo, capitán del presidio de Loreto. Esta etnia se dedicaba a la cacería, la pesca y la recolección. Cabe resaltar que, en la península de Baja California, la “Nación” Guaycura fue el primer grupo indígena en extinguirse.

La industria minera de la zona, que comprende a las comunidades de Santa Ana, El Triunfo y San Antonio, inició gracias a su suelo metalífero. El descubrimiento de las primeras vetas de oro y plata se dio gracias a las escoltas de las misiones españolas que se exploraban la región.

El Real de San Antonio es uno de los lugares más importantes de Baja California Sur, pues de este lugar salieron muchas de las familias que hicieron posible el poblamiento de otras regiones de la península. En 1769, partieron del Real de Santa Ana y de este lugar una de las dos expediciones que realizaron la fundación de la misión de San Diego en la Alta California.

La actividad minera requería de muchos insumos, por lo que surgieron los primeros ranchos ganaderos, lo que favoreció un importante desarrollo de la región de San Antonio hasta convertirla en el año 1829 en la segunda capital de la zona, después de Loreto. A principios del siglo XIX dicho desarrollo promovió los asentamientos humanos en la región sur de la península de Baja California, incluyendo la ciudad y puerto de La Paz, por donde llagaban los insumos necesarios para la actividad minera.

Parroquia de San Antonio

La planta arquitectónica de este templo consta de una nave alargada con crucero. Está orientada de norte a sur y originalmente tenía un techo de viguería de palma que sostenía gruesos ladrillos de barro cocido. Ese techo fue reemplazado por el actual, de concreto armado, que descansa sobre una serie de arcos de medio punto. Al fondo de la nave se localiza el altar principal que se conforma de una mesa sobre la que se levanta una estructura piramidal de cuatro cuerpos. La parte superior sirve de base a un tabernáculo que guarda una escultura de San Antonio de Padua, que según la tradición oral fue adquirida en San Francisco, California.

Las esculturas originales, algunas del siglo XVIII y otras del XIX, que en un principio decoraban el templo, fueron retiradas para que se conservaran en la casa parroquial del lugar. Aquí también se guardan los libros de bautizos y matrimonios que son fuente de consulta, pues se conservan en ellos los orígenes de gran parte de los linajes sudcalifornianos. Entre los documentos importantes que aquí se tienen está la Fe de Bautismo, del héroe sudcaliforniano José Manuel María Márquez de León.

De los sacerdotes que han administrado esta parroquia destaca el padre Gabriel González, último representante de las misiones y defensor de la nación mexicana en la guerra de intervención norteamericana de 1846-1848.

Existía en la zona una improvisada capilla en donde el misionero jesuita Juan Jacobo Baegert impartía los servicios religiosos a los creyentes. Viajaba desde la misión de Todos Santos hasta San Antonio, en donde era atendido por los mineros. Ya en el siglo XIX los pobladores realeños iniciaron la construcción del templo actual.

Durante los siglos XVIII y XIX, el Real de San Antonio fue uno de los centros mineros más importantes de California. Su antecedente más inmediato se encuentra en Santa Ana, real español fundado en 1748 por Manuel de Ocio, exsoldado de las escuelas misionales de California.


Fuentes

Altamirano, F. (1971). Exploración por oro y plata en Baja California Sur: 4 Seminario Interno Anual sobre exploración Geológico Minera. Consejo de Recursos Naturales no Renovables, México D.F. : 3-28.

Amao-Manríquez, J.L. (1984). Origen y desarrollo de la minería en Baja California Sur: Simposio sobre la historia de Baja California, La Paz, BCS : 17–27.

Amao-Manríquez, J.L. (1997). Mineros misioneros y rancheros de la antigua California. Instituto Nacional de Antropología e Historia, México, DF. 168 p.

ISLA y CONAFOR. (2015). Ordenamiento Territorial Comunitario, Ejido San Antonio, Municipio La Paz, Baja California Sur, Informe 2013-2015. Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), Conservación del Territorio Insular Mexicano, A.C. (ISLA), Comisariado Ejidal Ejido San Antonio. Programa Nacional Forestal Mayo 2015.

Ojeda-Ruiz, M.A., Bianchi-Estrada, S.A. y García de la Puente-Orozco, J.E. (2018). Plan estratégico para la reactivación económica de San Antonio, municipio de La Paz, Baja California Sur, México. 3C Empresa: investigación y pensamiento crítico, 7(2), 86-105. DOI: http://dx.doi.org/10.17993/3cemp.2018.070234.86-105/.